Por Fernando Peña
No es que queramos hacer leña del árbol caído. No. Pero los Santiagueros tenían razón, incluyendo entre ellos, uno que a última hora pasó a apoyar al Sindico José Enrique Sued, que hace día el Sindico y sus regidores lo declararon Hijo Distinguido y que expresó en el recién desaparecido periódico clavedidital que “nadie se ruboriza porque en Santiago el sindico tenga hermanos, primos, sobrinos y demás familiares trabajando en el ayuntamiento y que algunos de ellos a su vez son suplidores del mismo”.
Con la elección de Síndico de José Enrique Sued, quedó tristemente demostrado que para ser Alcalde no se requiere dote de político transparente, ni preparación y oratoria, sino un manejo de demagogia y clientelismo.
Quizás otra hubiese sido la suerte de José Enrique Sued si hubiese espantado a tiempo a tantas ‘ratas’ que merodearon en su entorno, porque no hay ninguna explicación lógica de que uno de sus asistentes y hombre de confianza, ganando un sueldo mensual de 11, 660 pesos, haya adquirido dos locales comerciales de 100 metros cada uno, en una plaza de la ciudad, valorados en alrededor de 7.5 millones de pesos.
Otros bienes supuestamente adquiridos por ese empleado público es un local en otra plaza, valorado en 1.5 millón de pesos y una boutique en la avenida Hermanas Mirabal.
Pero además, a nombre de su esposa, Jenny María Peralta, habría comprado varias viviendas, dos solares valorados en alrededor de dos millones de pesos, un edificio de varios niveles a un costo aproximado de cinco millones, tres casas en el sector Los Salados, una en Las Colinas y un apartamento en la avenida Benito Juárez. (ver el libro de Esteban Rosario).
La propia vice-sindica, Petrouschka Muñoz, denunció la corrupción sin límite que se aposentaba en el Ayuntamiento de Santiago; recientemente La Alianza Dominicana contra la Corrupción sometió por ante la Dirección Nacional de Persecución de la Corrupción al síndico, José Enrique Sued, acusado de haber manejado de forma irregular más de mil millones de pesos.
El expediente fue sometido por el presidente de la entidad, licenciado Julio César de la Rosa Tiburcio, Sued fue acusado de manejar el Ayuntamiento como si se trata de un patrimonio familiar, para beneficiar a familiares y allegados con el otorgamiento de obras grado a agrado.
La entidad sometió junto con el expediente otros documentos que dice soportan la querella contra Sued, tales como contratos, facturas, autorizaciones, solicitudes de confecciones de cheques y testimonios de personalidades.
En las ultimas horas el Ayuntamiento de Santiago ha recibido decenas de embargo de sus cuentas, por millones de pesos, por parte de suplidores, contratistas y compañía recolectora de basura.
El supuesto progreso de Santiago estaba sustentado en pie de barro, en deudas millonarias, que sobrepasan su propio presupuesto, llevando al Cabildo a una situación de descalabro financiero, nunca visto en la historia.
Mientras esto sucede, sus familiares, asistentes y amigos que trabajan en el Cabildo y son contratistas o suplidores, exhiben una bonanza económica que espanta…
Hoy la ciudad de Santiago es un caos, un desorden, anegada de basura hedionda, de ratas y alimañas, todo por la irresponsabilidad de un hombre que con la palabra de Dios en la boca nos engañó a todos…
Pero, con tal de que se vaya, aunque le vaya bien (por lo de la LIGA o la Gobernación). Que Dios lo guarde en compañía de sus familiares y amigos.
El autor es periodista
www.frontera25.blogspot.com
frontera25_@hotmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario