A Miguel Vargas, a su ascendente carrera política no le beneficia en nada que el PRD gane la contienda electoral sin su presencia militante en ese triunfo. Y si el PRD perdiera sin su participación, sobre sus hombros correrá el castigo de la derrota.
Después de la consabida tregua de navidad y al empezar el año que se acerca, el PRD, su dos principales líderes tienen que regalarle a los y las perredistas, así como a todo el pueblo dominicano el abrazo fraternal de la unidad, de eliminar las tensiones internas, de presentar un proyecto de nación que genere ilusiones de transformación…así se hace imbatible e imposible de detener el triunfo del partido blanco y la candidata presidencial de Don Hipólito Mejía.
Hipólito Mejía ya no es el candidato de un grupo, sino el candidato del Partido Revolucionario Dominicano, por ello hoy más que nunca se precisa del encuentro sincero de Hipólito y Miguel, es un pedido de todo el partido, de la sociedad dominicana, que observa, que sin esa unidad podría ponerse en peligro las aspiraciones de cambio de las mayorías nacionales.
Solo el PRD frena el cambio que clama el pueblo, solo el PRD frena las aspiraciones y las preferencias electorales que se manifiestan en los sondeos y las encuestas.
Ese clamor del pueblo debe ser la motivación principal que elimine las rencillas internas, los resquemores, la malquerencia, es hora de restañar las heridas imaginarias o reales, para consolidar el triunfo, y robustecer el prestigio, la fuerza del PRD y su candidato presidencial.
No nos equivoquemos. El error puede ser fatal para la supervivencia del PRD…
Ahora comienzan los días, las semanas, los meses finales más difíciles de todo este proceso electoral, esto requiere del trabajo político más arduo y desapasionado de todo militante, dirigente y simpatizante del PRD y de nuestro candidato Don Hipólito Mejía.
Ningún compañero puede ser ignorado o menospreciado…
Solo así podemos ser beneficiario del voto de esa gran franja de ciudadanos que está cansado del gobierno peledeista, de los mismos funcionarios, las mismas políticas, los mismos problemas sin solución, de la corrupción y el despilfarro con los dineros del erario público.
Leonel, el PLD, Margarita-Danilo, con el control del Estado utilizan los recursos públicos para intentar aumentar votantes, con un clientelismo burdo que lo contamina todo, pero la gente esta hastiada de sus políticas públicas, de su desorden, de su corrupción, y ese método clientelar es un arma de doble filo para su objetivo de permanencia en el Poder.
Esa es una vergonzante referencia de la política dominicana, que Leonel a instituido, cualquierizando la vida pública nacional.
Pero además, son maestro de la “marrullería” electoral, como quedo evidenciado en el pasado proceso electoral de medio tiempo. Con esa concepción tosca y ruda de la política emulan a Nicolás Maquiavelo, quien enseña cual religión del gobernante “la fuerza” y que su “culto debe ser el engaño”.
Se precisa de la unidad de Hipólito y Miguel, que en definitiva es la unidad verdadera del PRD alrededor del candidato y próximo presidente Don Hipólito Mejía.
Esta es una gran prueba que tiene el PRD y su dos principales líderes.
A Miguel Vargas, a su ascendente carrera política no le beneficia en nada que el PRD gane la contienda electoral sin su presencia militante en ese triunfo. Y si el PRD perdiera sin su participación, sobre sus hombros correrá el castigo de la derrota.
Usted Miguel no puede exponerse a esa situación, recuerde que el objetivo de un partido político, fundamentalmente, es llegar al gobierno, es la toma del Poder político, y nadie absolutamente nadie puede entorpecer ese cardinal propósito.
Unámonos! Hagamos el propósito de mantener, revivir la mística del partido, su vocación de sacrificio, sacrificio que deben asumir hoy Hipólito y Miguel.
EL autor es periodista
www.frontera25.com
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