Por Fernando Peña
El día que aquí hagamos una revisión bibliográfica de la corrupción pública, sin duda que este gobierno de Leonel Fernández tendrá un lugar preponderante. Cada vez más se acrecientan los hechos de corrupción, aparejado con ello la criminalidad, el narcotráfico y la precariedad en los servicios elementales de la gente.
Los niveles y patrones de corrupción han pasado de lo “normal” y “extendida” ha “sistemática”, es por ello que la sanción es nula, creando incentivo para el crecimiento de este mal.
Por ejemplo, lo que ha pasado en ADUANA en Santiago es para preocuparnos a todos los que vivimos en esta media isla.
Un fraude de mil millones de pesos, donde hasta contrabando de armas hay por el medio, y donde se señala e involucra a hijos de connotados dirigentes del PLD y funcionarios del gobierno en Santiago, es para que el presidente de la República intervenga y le de una explicación a los gobernados que somos cada uno de los que habitamos este terruño merecedor de mejor suerte.
La corrupción está llegando a unos niveles que puede ser extremadamente negativa para la estabilidad de nuestras instituciones democrática, lacerando severamente el estado de derecho y disminuyendo el crecimiento económico y la competitividad.
Se dice que el director de ADUANA mando a la fiscalia de Santiago el expediente vacío, sin nombrar a los hijos de los funcionarios responsable de este desfalco, porque supuestamente parte del dinero fue utilizado en la recién campaña electoral de medio tiempo de esta provincia.
Por ello es que nuestro socio y protector principal, EEUU, sus agencias principales no confían en nuestras instituciones, en nuestro gobierno.
Debe entender el presidente Leonel Fernández que este hecho de Santiago no es corrupción cotidiana, no, es un ejemplo de corrupción a los mas altos niveles que precisa de sanción ejemplarizadora para bien de nuestra estabilidad y la credibilidad de su gobierno.
Se necesita de voluntad política para extirpar este tipo de corrupción que ha llegado a nuestro país, que Robert Klitgaadr la llama la” corrupción sistemática,” que ya está generalizada y el aparato para limitarla y combatirla no es efectivo o está penetrado por ella.
Los niveles a que ha llegado la corrupción, los actores e individuos involucrados, la no sanción, nos indican que este es un gobierno débil, excluyente, donde las conductas corruptas son cada vez más abundantes.
Incluso funcionarios de la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos han revelado que Republica Dominicana no podía acceder a los fondos de la
“Cuenca el Milenio” por no cumplir con los indicadores de gobernabilidad, corrupción y mejora de la calidad de vida de la población.
Lo acontecido en ADUANA de Santiago debe ser sancionado, llevado a la justicia los implicados, sea quienes sean, es una oportunidad mas que tiene el presidente Leonel Fernández de sancionar a los que en su gobierno utilizan las funciones publicas para la abstención de beneficios personales, familiares o grupales.
El autor es periodista
www.frontera25.blogspot.com
frontera25_@hotmail.com
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