Lo que están haciendo en la Junta Central Electoral es una conspiración peligrosa, el oficialismo esta temeroso y sabe que a pesar del control que se han impuesto de todos los poderes del Estado, hay una decisión, hay una voluntad del pueblo dominicano que se expresara libremente en las urnas el 20 de mayo.
No es un secreto para nadie que la conformación de la Junta Central Electoral, de las Juntas Municipales Electorales se efectúa por acuerdos y consensos de los partidos políticos, básicamente de los mayoritarios.
Es un proyecto consensuado, con garantías de independencia, que permite una cierta licencia proselitista a los integrantes de esas Juntas.
Aquí todo el mundo conoce las inclinaciones políticas o la militancia del presidente de la Junta Central Electoral, doctor Roberto Rosario, así como de cada uno de los integrantes del tribunal electoral. De igual manera que de los integrantes de las Juntas municipales.
Siendo así, extraña que el presidente del Partido de la Liberación Dominicana, Monchy Rodríguez, expresara públicamente que su organización solicito la exclusión de Franklin Rosa, como miembro de la Junta Municipal de Santiago por su inclinación al Partido Revolucionario Dominicano.
Con estas declaraciones la crisis de la Junta Electoral de Santiago de los Caballeros toma un nuevo giro al evidenciarse que fue ha pedido del partido de gobierno que se hizo la nueva composición de esa entidad en la segunda ciudad más importante de República Dominicana.
“De los tres magistrados, entendíamos que dos, eran personas realmente imparciales que podían tomar una decisión acorde con su intima convicción”, declaró el presidente del PLD en Santiago, Monchy Rodríguez, al reiterar la acusación de “perredeísta” contra Rosa.
Como los Cesares, como en las monarquías quieren el control de todos los poderes.
Lo que están haciendo en la Junta Central Electoral es una conspiración peligrosa, el oficialismo esta temeroso y sabe que a pesar del control que se han impuesto de todos los poderes del Estado, hay una decisión, hay una voluntad del pueblo dominicano que se expresara libremente en las urnas el 20 de mayo.
Aquí se quiere jugar con candela, ya el asado no huele en el lugar de ante, y quieren como monigotes prestarse al capricho del “supremo”, sin importarle cuánto daño puedan hacer a la sociedad.
Ahora quieren sacar de la JCE y de las Juntas Municipales a los que no pertenecen a su “circulo” o a su “circo”.
Hasta donde es que quieren llegar? ¿Hasta cuándo seguirán impidiendo que tengamos justicia, igualdad de oportunidades, independencia de los poderes públicos, etc.?
El PRD no debe darle ni un minuto más ni un minuto menos para que acaben el montaje de la chapucería, el chanyuyo, la camarería que los oficialistas están montando en la JCE.
¡Después no se lamenten!
El autor es periodista
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